Este es un claro ejemplo de esos grupos que vas a ver en directo no sólo por su música, sino también porque sabes que la fiesta está asegurada, porque son ellos los primeros que se lo pasan de miedo. Así que no podíamos perdernos la cita organizada como uno de los actos de la Benvinguda a la Universitat para ver a los de Barcelona en la Sala Noise.
La verdad es que entre el público se veía poco universitario porque, aunque algún despistado sí que se había colado, la gran mayoría de la gente que completaba el aforo tenía pinta de haber dejado las aulas hacía ya algún tiempo.
Como declaración de intenciones de lo que iba a pasar salieron al escenario con áperos de playa y collares hawaianos, mientras sonaba el Wouldn’t It Be Nice de los Beach Boys. Y, una vez dejaron las palas y la sombrilla, empezaron fuertes desplegando su rock psicodélico con Fascinado y Persona. La gente entraba rápidamente en calor con los acordes, y mientras sonaban nos preguntábamos cuántas noches de desenfreno habrán vivido este grupo de divertidos canallas. Concluimos que no deben ser pocas.
Una increíble A Mil Años Luz y El Bosque, que empezó a tocar Marc en solitario modo acústico para ir uniéndose el resto de la banda progresivamente, fueron su pasó por El Fluido García. Y, aunque ya no tocan sus canciones en ingles de los dos primeros álbumes, superaron la morriña de cantar en la lengua de los guiris nada menos que con una versión del My Generation de los Who.
Eso sí, no tardaron en llegar las canciones del último LP, Sierra y Canadá, tocando el tema del mismo nombre y, posteriormente, la muy sugerente Gainsbourg. Nos abstrajimos entonces por un momento de la fiesta que generan los catalanes para reparar en sus letras. Esas letras selectas, llenas de referencias personajes, a lugares y situaciones, a veces no demasiado obvias, pero que tienen la capacidad de llevarte perfectamente al paisaje sonoro que quieren dibujar.
Aprovechó entonces un Marc con ganas de interactuar con el numeroso público, y hablando siempre en catalán, para presentar al grupo. Y es que además de los fijos Jes Senra, Axel Pi y el propio Marc, para esta gira contaban con la colaboración de Marcel Caballé a la guitara y Edu Martinez a los teclados.
Justo antes de presentar la canción Eclipse Personal, que aparecerá en la última película de José Corbacho, se inventaron un mendley con Los Olvidados, Giraluna y En Mi Garganta, que no quedó nada mal, aunque algunos echamos de menos que se tocaran las versiones completas.
El público estaba ya completamente entregado, y enloqueció con el baile sensual de Marc en Yo Soy La Crema, y gritó a pleno pulmón el estribillo de Un Día Más En La Vida, y acudió al encuentro de Marc cuando recorrió en volandas el recinto mientras sonaba la magnífica Un Día De Mierda, y saltó como si no hubiera mañana con El Incendio, justo antes de que Sidonie se tomara un descansito y se metieran en el camerino para coger fuerzas.
Reaparecieron los componentes del grupo uniformados con cazadoras con el logo de la gira, que toca a su fin después de recorrer toda España, y retomaron el recital con El Mismo Destello, con el lider de la banda al ukelele, seguida de la “mesalencorazonesporlosojos” Por Ti, en la que Jes, al igual que haría en Los Olvidados, hacia la replica a la voz de Marc.
El espectáculo se acababa y sonarón Bailemos y, a modo de agradecimiento hacia el público, Estáis Aquí, con el que la gente se dejo lo poco que quedaba de sus cuerdas vocales.
Guiño final para Pau, guitarrista de La Habitación Roja, grupo con el que tienen una gran amistad, que se encargaría de hacer la crítica del concierto.
Y tal como vinieron se fueron, con los Beach Boys de fondo. Y haciendo que todos los presentes desearan volver a la universidad para poder disfrutar de fiestas así, y de invitados de auténtico nivel como Sidonie.



